miércoles, 19 de octubre de 2011

Abismos



¿A veces no sentimos que nuestro mundo se cae poco a poco? Como si la “mala suerte” estaria de protagonista o una nube gris andaría sobre nuestra cabeza (llueve, caen rayos y todos los fenómenos naturales que existen y no logramos percibir el calor del sol).



Pues suele suceder, hoy no es una excepción; me siento como si la noche que estoy observando no tendría luna ni estrellas , como si los deseos que atesore en mi mente nunca sucederán, siento que caí al abismo y estoy perdida, entre la oscuridad y el silencio sin encontrar algún camino que deba seguir para volver, sin divisar aquella luz que tuve presente toda mi vida, en la que creí, en la que me apoyé...



Lágrimas pasean por mi rostro, siento decepción, no de alguien ni algo, sino de mi misma, no me reconozco ¿Quién soy? ¿Será que perdí la esperanza de salir y deje de ser yo? O simplemente camine por caminar, pude cruzarme con tu luz, pero no hice caso...me deje llevar porque pensé que yo sola podía solucionarlo y de mejor forma.



No, hoy me doy cuenta que no es así, que necesitamos ayuda, que no somos autosuficientes, por más que creamos serlo...Tú eres esa Luz, hoy dije que no creía en ti y sentí que me desplomaba más y más...perdóname, sabes que grite al cielo más de una vez, no es tu culpa, es la mía, nosotros somos responsables de lo que hacemos, tú no nos obligas a tomar decisiones, esperas a que salga de nuestro corazón.



Hoy obré mal, tengo miedo de enfrentar todo esto, pero si tú estas conmigo se que tomaré vuelo y con fuerza saldré a la superficie con muchas ganas de luchar , derrepente sea otro sendero...Solo confío en ti. Bendíceme.

domingo, 9 de octubre de 2011

Un minuto de Paz



Despiertas...Hoy no es un día cualquiera, agradeces al Señor porque amanece con un resplandeciente sol y es que las ganas de vivir nunca se acabaran, de volar sin frenos en el inmenso cielo, sin conocer el límite de tus fuerzas, simplemente agitar las alas y dejarte llevar hacia la felicidad.


Hoy no eres el mismo, cierras los ojos y curiosamente quieres explorar que existe en el fondo de tu corazón y al abrirlos te das cuenta que tu mirada quiere divisar más allá de lo que solías percibir, hay nuevos objetivos, nuevos logros, viejas metas que estas por alcanzar...Hoy quieres ser mejor que ayer, sabes que nunca es tarde para hacer las cosas bien.


La realidad muchas veces no es como quisiéramos que sea, pero date el lujo de sonreír y ser feliz, que el dolor y la sangre no te detengan...sueña, anhela, lucha y no te rindas, aunque llueva un día más que otro, aunque el sol se demore en salir de las penumbras, nunca te rindas, levántate con más energías.


Mientras tus ojos quieren buscar que más sorpresas puedes encontrar, vez a tu alrededor personas valiosas que siempre permanecieron en tu vida...personas que nunca te abandonaron, ni en los peores momentos, pues si, ahí se encuentra tu familia, seres que amas con toda tu alma, que robas sonrisas y fuertes carcajadas día a día y agradeces por su existencia.


Pero recuerda, tu sonrisa debe ser sincera eternamente y tu corazón joven nunca dejara de latir, son los tesoros que debes conservar en el jardín del tiempo.


Existen personas especiales que se cruzan en el camino, no importan los minutos, horas, años que las conozcamos sino las huellas que éstas dejaran en nuestras vidas, huellas que ni el viento podrá borrar.


Que tus días no se cansen de ser especiales y diferentes, como tú.




09/10/11





domingo, 7 de agosto de 2011

Memorias



No vengo a contarte lo que siempre escuchas, tampoco explicare lo inexplicable, hoy quiero ser una pétalo más de la flor, quiero ser libre como el viento que susurra en tus oídos , cerrar los ojos y volar sobre el mar como un pájaro que desafía al destino arrastrando las nubes que intentan detenerme.


Hoy apagaron la luz, no tuve miedo porque se que fuiste tú, en el silencio escuché tus pasos dóciles por el pasillo, disimuladamente asomé mi cabeza por la puerta y conseguí verte, me alegró mucho, necesitaba de tu visita ¿Cómo estas? Te extraño tanto, te siento tan lejos y tan cerca, pregunto al cielo cada día al amanecer cuándo volveré a verte, si será mañana o en mucho tiempo...Imagino tu rostro, si seguirá siendo el mismo o habrás cambiado, pero no encuentro respuesta alguna, solo la dulce mirada de mi madre me hace dar cuenta de que tú estas ahí.


¿Recuerdas cuando me sentaba a tu lado para oír las historias fantásticas que contabas? Siempre molestándote con mi curiosidad de querer saber más, añoro esos momentos, hasta el último cuando cogí tu tibia mano y te di un beso en la frente, mientras algunas lágrimas paseaban por nuestros rostros y solo pedías que sonría, porque tú eras feliz cuando yo lo era; pero no se puede retroceder el tiempo, el reloj siempre ha de avanzar y no hay marcha atrás.


Estos días se han vuelto raros, a veces pido que la tierra deje de girar y descansemos un momento, al menos un segundo para tomar vuelo y empezar, daría mis tesoros más preciados para que sigas junto a nosotros, conocer que opinarías de todas las cosas que han sucedido , irónica la vida regresaste a nosotros en pequeños hijos de Dios, parece que fue ayer cuando te fuiste de casa , siento que fue ayer cuando iba con mi mama al hospital, no quería faltar ni un solo día, no me importaba nada más que tú , solo quería verte y darte un abrazo de los que tanto te gustaban, me haces mucha falta , pero estoy muy feliz también por haber compartido momentos maravillosos contigo , se que no muchas personas tienen a sus abuelos cerca o no los valoran como debe ser, pero el Señor me dio la oportunidad de estar contigo mucho tiempo, como tú dijiste, no debemos reclamar al cielo, al contrario, agradecer por estar vivos.

Gracias abuelito por todo lo que me enseñaste, siempre te voy a tener en mi vida, cuidaré a mi mami como tú pedías cada día al vernos, se que estas muy bien, caminando y sembrando hermosas rosas, espero que algún día me regales una.


Te quiero mucho Vidalito, eres mi estrella más bonita

sábado, 11 de junio de 2011

En otro mundo




Chocolates y caramelos, entre la locura y la realidad me pierdo, pero no importa por que busco algo diferente; no se que camino tomar, miro el cielo buscando una señal y la luna atrevida ilumina mi caminar, no tengo con quien vagar y entre los recuerdos encuentro tu mirar... alto, no es tu mirar, solo una paloma que sale de la oscuridad... Nuevamente sigo mi rumbo, dicen que al final del camino hallaré la respuesta a mi mal o ¿serán tonterías que han de inventar?


El frio acaricia mis oídos y con sus lanzas de hielo empieza a atacar...corro sin gritar porque no me puede alcanzar; encuentro un pequeño lugar seguramente nadie lo ha de frecuentar, cierro mis ojos sin pensar que el viento llora por mí sin parar, llora tan fuerte que pesadillas me ha de ocasionar, en otros mundos tendré que volar hasta que el sol salga para cantar.


Lalala en mi mente, lalala en mi corazón; te digo buenos días amigo, buenos días y adiós, el tiempo no me puede ganar, quiero llegar al final de la travesía sin descansar.


Camino y camino, mis zapatos desgastados gritan desesperados, no se que hacer para callarlos, quizás un poco de agua y tierra podrán calmarlos...
un minuto sacrificare y mi vida salvare , al cansancio venceré y tus huellas seguire.

Es extraño, aun no llego a mi destino, pero debo tener suerte porque atraje a la muerte, que en medio de mi caminar a un baile me ha de invitar...Cuentan que las mejores personas asistirán, de gala vestirán y mostrando sus mejores carruajes andarán.

La magia y fantasia en una capa oscura nos envolverán , retozarán con nuestras mentes y nos haran olvidar que al final de la vida hemos llegado.

jueves, 31 de marzo de 2011

Y me diste nombre


A pasos temerosos te digo hola de nuevo y como hijo pródigo corro a tus brazos mientras me sonrojo ante tu poder, se que no esperabas mi visita y que desde hace mucho no conversamos, tú sabes todo sobre mi vida, pero yo me perdí tristemente entre la soledad y el miedo...


Tú solo agradeces mi presencia y preparas con mucho amor los mejores manjares para darme la bienvenida, pero es que así somos los seres humanos, volvemos a ti solo cuando necesitamos ayuda y comprensión, cuando el mundo dejó de girar y nos sentimos rechazados, cuando queremos pedir algún favor y ¿qué hacemos nosotros por ti?


Gracias por darme la vida, por la familia que tanto amo, por los buenos amigos que conocí, por todos los momentos que pase, te encontré en la sonrisa del niño ¿Recuerdas? La inocencia corría como sangre por mis venas aquellos años y te sentía tan cerca, que el mundo se hizo simple y feliz, las letras de canciones para ti , eran como poemas salidos del alma; te encontré en el abrazo del pobre, mientras mis lágrimas recorrían aquel frígido rostro y en el gracias del anciano a quien me presentaste para ayudar; te vi en los ojos de aquel ciego , si, él que imaginaba mi rostro y lo describía cada mañana; te escuche en las palabras de mi abuelo cuando en medio de secas esperanzas brillaba una luz de misericordia...te encontré, pero después me oculté.


Me escondí, me tape los oídos y puse una venda en mis ojos, no quería ver mi realidad, tú aparecías de nuevo, pero escapaba...me sonreías y miraba a otro lado, me llamabas y desviaba el camino... se que nunca me abandonaste, por que yo me aleje, pero siempre estabas ahí, cuidando de mi, protegiendo cada paso que daba, muchas veces el odio se apoderaba de mi alma , te acusaba injustamente de mis errores y a pesar de la indiferencia, me brindabas tu ayuda, me regalabas un abrazo de mi madre y consejos de algún amigo.


Hoy vengo con la cabeza agachada y el perdón en mi boca, no quiero apartarme nunca más de ti...lléname de tu paz y que refleje luz al mundo, dame fuerza y voluntad para ayudar, para volver a casa y sonreír llena de tu gloria...

domingo, 13 de marzo de 2011

Amanece


Y desperté, mis temores habían desaparecido, estabas tú ahí, yo en mi realidad… Mi deseo más profundo, el pedido más grande que mi ser había soñado.

Me perdone a mi misma y eso bastó para que tu lo hicieras después, no más rencores, no más peleas, estábamos los dos como almas puras, mirándonos sumergidos en un abrazo, como si el reloj no avanzara, como si la distancia no existiera, lo importante era abrigar el silencio.

La vida emprendía nuevamente, los latidos de tu corazón traveseaban con los míos y un simple beso en la frente valía más que todas las riquezas del mundo.
Tantos segundos indagando como llegar a tu corazón de limón, para no conseguir tu compasión sino el universo de tu sonrisa.

Esperaba algún gesto tuyo que me diera la señal para continuar en la travesía, no me importaba esperar hasta que la nieve del tiempo envuelva mis cabellos negros, por que sabía que tú eras mi felicidad.


Me enseñaste muchas cosas en tan pocos instantes, pero no interesa el tiempo que subsista pues hay personas que no borras jamás.

El dueño de mis sueños y mis desvelos, imposible no dejar un segundo del día para no pensar en ti, tus recuerdos curioseaban por mi ventana y el olvido hacia de las suyas para no ahogarte en sus mares.

La soledad me llevó a conocer un amigo llamado tiempo; tiempo que agradezco, tiempo a quien pido compasión, tiempo que no dedique para mi, tiempo que me dio la respuesta para encontrar un claro sentido a mi vida. No hay mejor persona que te ame, más que tú misma; no existe una sonrisa perfecta más que la tuya, no sentimos el verdadero perdón más que el realizado hacia tu espíritu…

Y es cuando sentí el verdadero amor, es cuando volví a tropezar con tus huellas en medio de mi camino…El pasado que nos separó, ya paso; nuestras risas se escuchan a lo lejos.

jueves, 20 de enero de 2011

Heridas que no sangran



"Este adiós no maquilla un hasta luego,este nunca no esconde un ojala, estas cenizas no juegan con fuego, este ciego no mira para atrás"...-Joaquin Sabina

Después de la última discusión, ambos utilizando nuestras mejores armas para destruir lo poco que edificamos y es que a veces reclamamos tanto que cuando lo tenemos, perdemos la razón y nos quedamos solos; fue mi culpa, lo admito...Mis mentiras y el orgullo jugaron sanguinariamente esa noche y tu sinceridad como buena pieza ahogo el fuego dela batalla.

Tiempo al tiempo, el tiempo es nuestro mejor aliado, tiempo para perdonar, tiempo para olvidar pero no es el tiempo el que cura todas las heridas, sino el amor; no es más que una ilusión causada por la mente, somos el resultado de lo que vivimos en el tiempo y debemos asumir responsabilidad de eso...Muchas personas van y vienen, influyen en nuestras vidas y dejan huellas, pero pocas son las que vuelven, te deje las últimas letras de mi canción.

Sucede que cuando más tristes estamos, el corazón roto recibe con vendas en los ojos una sonrisa, un abrazo, una esperanza y un perdón.

Y así de poquito a poquito, te has adueñado de mis sueños, mis pensamientos y eras mi inspiración, como la primera vez; tu voz cándida me daba la seguridad de que por fin había llegado el día de ser feliz, apartarme de las tristezas, los celos y falsos amigos...creí que la vida nos daba una segunda parte.

Cuando sentía que todo era perfecto, aprovechaste para atacar, un jaque mate sin temor, cobraste lo que debía y ganaste más de la cuenta, pero debo decirte algo, no me pongo triste, claro que no, porque se que cuando el destino nos junte de nuevo , no poseeremos deudas ni pendientes, podre mirarte a los ojos sin sentir culpa; me diste una cucharada de mi propia medicina y gracias, aprendí a no hacer otros, lo que no quiero que me hagan ; ahora si puedo vociferar libertad para empezar y ser mejor, ahora puedo resucitar.

Cada cual por el camino más feliz, con tu recuerdo me iré, pero será el más bonito, no te extrañaré, la soledad puede ser muchas veces la mejor compañía; tampoco te odiaré, eso es de niños.

Y como dice Calamaro...Buena suerte y Hasta Luego.

miércoles, 5 de enero de 2011

La mujer de mis sueños I


Con el cabello mojado tentando a la gripe de mañanas congeladas, con unas medias extrañas y converse morada (fiel compañera de eternas caminatas), jean azul y una polera gigante, estaba ella, corriendo por el patio de aquel colegio, sin tener miedo de sufrir una caída, como si el mundo fuera solo de ella y sus alumnos, pequeños niños que la abrazan y besan su hermoso pelo negro mientras juguetea con el viento, en mis veinticuatro años de vida, nunca vi una mujer igual, conocerla será mi reto y conquistarla alguna historia sin conclusión.

Mientras me pierdo en su ternura incalculable, pienso que por ella seria capaz de bajar las estrellas más altas del cielo, por ella podría atravesar hasta los océanos nadando, porque solo con divisar su sonrisa, todo el cansancio desaparecería, aquella sonrisa que aliviaría mis males, curaría mi corazón y me haría feliz.

Se que en su mente no estoy presente, que sus sueños tienen otro dueño y que sus ilusiones quizás no tengan mi nombre, para ella solo soy un loco desconocido que la admira ¿Conseguiré ser algún día el dueño de sus bellos ojos negros?

Detrás de su misteriosa mirada, puedo leer tristeza, una muy disimulada; lágrimas retraídas ¿Será que a pesar de brindar sonrisas, amor y ternura a aquellos niños, no es feliz completamente?

El sol se hace más enérgico como suele suceder las mañanas de los domingos, en unos minutos será salida de aquel oratorio, el colegio cerrará y ella desaparecerá, como mis sueños; y es que nunca creí en el amor a primera vista, pero tampoco los años significan amor...pues en algún momento de mi vida pase por eso, hoy soy un hombre con ganas de enamorarme, dos años en soledad han hecho que mi puerta nuevamente quiera abrirse.
Suena el timbre de salida y ella guarda sus cosas, se despide de cada niño, pero mis ojos no logran aislarse de su desconsuelo.

En medio del silencio, los nervios empiezan a retozar conmigo...
-¿Hola?-dijo ella, con el rostro lleno de lágrimas, pero pretendiendo ocultar dicha pena con una sonrisa cálida.
- Disculpa, no quería incomodar, ya me iba (¡rayos!) no me quedo, o sea no me voy pero me quedo, mejor olvida lo que dije antes ¿Qué sucede? ¿Puedo ayudarte?-pregunté o quizás la asusté, fue una mala imitación del característico chico educado.
- Jajaja ¿Cómo te llamas?- respondió, riendo como siempre, secando sus ojos con un delicado pañolón blanco.
- Carlos, me llamo Carlos...y ¿Tú-u-u?- balbucee, sentía que la sangre subía a mi cerebro e iniciaba la explosión de una bomba atómica mientras la conciencia decía a gritos que me deje llevar.
-Margarita, mucho gusto...¿A qué se debe tu presencia en el colegio?-
gritó, intentando que pueda responder con serenidad.


Continuara...